Ciclos y líneas
Los publicistas vivimos en el mundo más artificial que existe y sin embargo estamos sujetos a las mismas reglas del mundo natural. Por eso es importante preguntarse si efectivamente el mundo progresa en forma lineal o cíclica, porque de la respuesta depende el éxito o fracaso de nuestras estrategias.
La idea de la progresión lineal viene de la era de ilustración, cuando los filósofos asumieron que la humanidad estaba progresando desde una era “oscura” dominada por el pensamiento mágico y la religión, hacia una era de total entendimiento racional y científico.
Pero la realidad ha demostrado que la humanidad no ha progresado mucho, sólo ha cambiado. Si antes uno viajaba a 10 kilómetros por hora en caballo, hoy viaja a 10 kilómetros por hora en automóvil. El medio ha cambiado, pero la realidad sigue siendo la misma. Antes existía la esclavitud forzada por guerras y hoy existe la esclavitud por deudas. El resultado es el mismo, quizás incluso peor, aunque los nombres cambien.
Para la mayoría de la gente, hoy igual que en la edad media, el mundo sigue siendo mágico y religioso. Sin duda hay muchos científicos dando explicaciones racionales a los fenómenos naturales, pero para el ciudadano común la forma como la gasolina se convierte en movimiento y los huevos llegan a la mesa sigue siendo un misterio. Increíblemente, mucha gente aún cree que los objetos pesados caen más rápido que los livianos .
Así que no es tan loco suponer que el mundo gira en ciclos uno encima del otro y no en progresión lineal hacia el infinito, mucho más parecidos a estos aros de piña que a una regla de dimensiones infinitas.
Si el mundo gira en ciclos, muy pronto veremos la caída de los nuevos medios y el resurgimiento de los tradicionales. Con nuevas formas, pero fundamentalmente los mismos. Las antiguas estrategias volverán a tener validez y los mercadólogos seguirán ofreciendo un “blanco aún más blanco” en sus detergentes.
Porque al final de cuentas, entre más cambia el mundo, más sigue siendo el mismo.